El analista y consultor económico Salvador Di Stefano participó de GPS Financiero, el primer evento digital de Nera que buscó acercarle al productor certezas sobre clima, gestión y economía en esta campaña 2024/25. Di Stefano desglosó distintas opciones de financiamiento y concluyó “tomar créditos en dólares a tasas inferiores al 5%, es un regalo".
Se realizó la primera edición de GPS Financiero, una nueva propuesta de Nera para aportar información concreta y de valor para la toma de decisiones del productor.
Durante el evento hubo diversos paneles abocados a clima, gestión y análisis económico. Sobre éste último, el disertante invitado fue Salvador Di Stefano, quién dio su mirada sobre la situación de la macro, analizó diversas opciones crediticias y financieras del negocio agrícola y repasó las alternativas del productor ganadero.
La macro
Di Stefano explicó que la política económica de Javier Milei muestra un perfil ordenado basado en los superávits fiscal y comercial, la baja de la inflación y la normalización de la balanza de pagos. Ante este escenario, el analista descartó la posibilidad de una devaluación mayor a la proyectada por el Gobierno.
Estas nuevas variables, distintas a las de años anteriores, llevan al productor a ser más analítico y poner el foco en su gestión: entender mejor qué tipo de empresa tiene, cuáles son sus ingresos, sus gastos, cuál es la rentabilidad deseada, preguntarse por la inflación y la devaluación esperada y a determinar su ciclo de cobro, la contribución marginal y el flujo de fondos libre de caja.
Financiación
Al momento de financiarse, Di Stefano revisó algunos temas de la macro actual para basar su conclusión sobre la conveniencia del crédito en dólares.
Aseveró que el cepo no se va a levantar en el corto plazo (allí hizo referencia a la base monetaria ampliada y comparó la que recibió Milei al asumir y la actual). Y a su vez, indicó que la inflación para los próximos 12 meses -estimación elaborada por su consultora- será del 31%.
Ante estos dos datos reflexionó: “tomemos como referencia o ejemplo que te ofrecen una tasa en pesos al 50%; esto significa que la tasa real positiva es del 14%”.
“Ahora supongamos que la otra opción es una tasa en dólares atada a dólar linked más 5 puntos” ejemplificó Di Stefano. “Eso en términos de pesos representa un 36,5%, que al equipararla contra la inflación implica una tasa real positiva del 4%”; por lo cual la conclusión del consultor es “en el crédito en dólares tengo menos tasa real positiva y encima cuando me ajusten por inflación -en lo impositivo- me desgrava en ganancias”, concluyó.
El arbitraje de tasas como oportunidad
Al promediar la charla con Di Stefano, surgió una frase que abrió la exploración hacia nuevas ventanas de oportunidad. “Tener el dinero estacionado, es tener plata a pérdida”, fue la aseveración vertida por el analista y consultor. A lo que agregó “el único stock de soja que tiene que tener el productor, tiene que ser para pagar el alquiler del campo”.
Di Stefano fue más allá y ahondó en estos conceptos al indicar que “hoy las LECAPs te ofrecen una tasa pasiva del 60%, que son tasas más elevadas que la inflación”. Por ende, la oportunidad -explicó- consiste en vender la mercadería almacenada, colocar ese ingreso en LECAPs (vía IAMC) y financiar con crédito la inversión de insumos. “La plata tiene que estar en movimiento generando flujo”, concluyó.
Distintos tipos de endeudamiento
En otro de los pasajes del diálogo, se hizo hincapié en el endeudamiento operacional y el endeudamiento financiero. Di Stefano exhortó a los productores a entender el arrendamiento como una parte del endeudamiento. “No es lo mismo comprometer el 40% de los quintales en un campo que vas a sembrar con soja, que sembrar con maíz y comprometer el 27%”, indicó. “Al sumar la inversión en insumos, en soja estás comprometiendo el 60% de lo que coseches, en maíz ese porcentaje termina siendo inferior al 50%”, aseguró. “Si al finalizar el ciclo, tenes una baja de rinde; en soja vas a estar en problemas pero en maíz todavía la vas a estar peleando”.
Asesoramiento y comercialización
Antes de pasar al análisis ganadero, Di Stefano revalorizó la profesión del Ingeniero Agrónomo al sentenciar “no hay que ser mezquino con los insumos y para eso el asesoramiento profesional es clave; es una campaña donde se necesita mucho manejo agronómico”.
Por último recomendó comercializar la cosecha futura en cinco etapas y en la misma proporción, para asegurar un buen precio promedio y reducir el riesgo.